Por bajarse la cortina de este 2020, un año con hartos bemoles, pérdidas, días atípicos en medio de una pandemia que sacó lo mejor y peor de la gente, un tiempo en el que vimos de qué está hecha la humanidad, y por ende las y los políticos, que en la mayor parte de los casos fue el común denominador las grandes decepciones.
En el ámbito federal un presidente López que minimizó este mortal COVID-19, que expresó penosas declaraciones como que la pandemia había caído “como anillo al dedo” que sigue sin utilizar las medidas sanitarias.
El presidente es flanqueado por un inepto y estólido subsecretario de Salud como Hugo López-Gattel de quien dicen se perdió un buen médico para ganar un mediocre y estúpido político.
En Quintana Roo, en medio de esta pandemia el gobernador Carlos Joaquín González, sacó la casta e incluso se contagió de COVID-19, por trabajar sin pretexto alguno, mantuvo una permanente cercanía con la gente, implementó medidas emergentes, y apoyó a la ciudadanía en general a través de diversos programas locales.
Programas que hicieron frente a la pandemia con la entrega de paquetes alimentarios, subsidios en agua potable, entrega de vales de gas LP, entre otros beneficios, una permanente coordinación con empresarios para no subir cobros, incluso incentivos fiscales y condonaciones de impuestos durante la pandemia.
Todo esto hizo el gobernador Carlos Joaquín, mientras que el gobierno federal a través de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) fingió demencia y no hizo nada por apoyar a las y los quintanarroenses, en el frente estatal, también hubo serias deficiencias, pocas y pocos fueron los secretarios y secretarias que se la rifaron e hicieron frente a esta emergencia.
En tanto hubo personajes en lo local ensombrecidos por la soberbia y la ignorancia como Alejandra Aguirre Crespo titular de Salud en Quintana Roo, quien en esta pandemia salió a la palestra, luego de estar en el ostracismo sin chiste alguno en su labor al frente de la importante secretaría, sitio en el que la opacidad en el manejo de recursos financieros es la constante.
Una funcionaria interesada en el glamour, de cero resultados y quien en esta pandemia salió a foco para solamente hacer público que es alguien con poca capacidad de resolución, quien no ocupa dicha encomienda por talento médico, ya que su inopia es latente y los números no mienten en quintanarroenses fallecidos.
De poco sirve el esfuerzo que personajes como Carlos Joaquín han hecho en contra del COVID-19, cuando Alejandra Aguirre Crespo quien ha hecho su agosto en pleno diciembre, en una SESA en la que la rapacidad es la constante, un sitio en el que sus titulares y administrativos se han hecho millonarios, mientras que la base trabajadora espera sus bonos COVID.
La silla de la titular de la secretaría de Salud le ha quedado muy grande en la pandemia a Aguirre Crespo, en donde cada vez son más las voces que solicitan su remoción, ya que el nivel operativo de la secretaría es deficiente, como lo es su todavía titular.
CURVA PELIGROSA…
Y quien le gusta jugarle al Santa Claus con dinero ajeno es al Tesorero de Cozumel Hilario Gutiérrez Valasis, quien según nos reportan Heraldos de Xlalibre, no busca en qué gastarse el erario cozumeleño, y en diversas tiendas departamentales de sitios como Playa del Carmen, le gusta facturar sus compras personales al ayuntamiento de la isla de las golondrinas en donde administra las finanzas de las y isleños.
Atento debe estar el edil cozumeleño Pedro Joaquín de ver los gastos de su Tesorero, quien todo indica está sirviéndose con la cuchara grande, y mientras hay diversos pagos y compromisos qué hacer Gutiérrez Valasis anda de shopping dejando mal a su jefe, quien cada vez tiene más difícil su reelección.
Y recuerden… Esto es Sólo para Informad@s, si ustedes no estuvieran ahí leyendo yo no estaría aquí escribiendo, y si ser Malix el Huso Horario, el Whatsapp, el Facebook, Twitter, la CFE, López, el Covid19, los troles y envidiosos nos lo permiten nos leemos pronto Dios mediante pero que sea Xlalibre